En simultáneo, en Jaén, se dio la captura de otros dos presuntos implicados en este cruel asesinato: Elmer Cubas Diaz, de 20 años y Bagner Medina Sánchez, 19 años, ambos encontrados en el sector de Nuevo Horizonte.
La DIVIAC les siguió los pasos hasta obtener la orden de detención de parte de Ministerio Público.
Estas capturas han traído un respiro de tranquilidad a la familia de la víctima, que durante semanas clamó por justicia. Janet Sánchez, esposa del fallecido, compartió sus emociones en una entrevista exclusiva con Radio Marañón, reveló detalles impactantes sobre la relación entre su esposo y el acusado, así como los eventos que llevaron a la trágica muerte de Sena.
Janet Sánchez comenzó relatando la estrecha relación que Becerra tenía con su esposo. «Él era nuestro vendedor durante siete años, desde que mi esposo empezó en el negocio del cigarro. Antes, trabajaban juntos en una empresa. Era un compañero de trabajo que se convirtió en su distribuidor y amigo cercano».
El día del asesinato, Becerra fue la última persona en ver a Sena con vida. «Viendo las cámaras, se ha corroborado que mi esposo llegó a la casa de Nelson, pero nunca salió de ese lugar», explicó Janet. «Las cámaras captaron el ingreso de mi esposo al barrio donde vivía Becerra, pero nunca lo vieron salir».
La familia siempre tuvo sospechas sobre Becerra. «Desde un principio, sabíamos que Nelson Becerra era el principal sospechoso. Había discusiones porque Nelson le robaba mercadería a mi esposo, pero nosotros lo apoyábamos porque tenía un hijito», explicó Janet. A pesar de esta desconfianza, la familia nunca imaginó la magnitud de la traición.
Sobre el móvil del asesinato, Janet está segura de que se trató de un conflicto por el negocio del cigarro. «Él quería quedarse con el mercado», aseguró. La tensión culminó en el trágico día en que Edgar Sena Heredia fue encontrado muerto en el río Marañón, con visibles signos de tortura.
Durante los días siguientes a la desaparición de Edgar, Nelson Becerra se mostró aparentemente preocupado y colaborativo. Janet recuerda cómo Becerra llegó incluso a asistir al velorio de Edgar, mostrando comportamientos sospechosos. «Apareció en el velorio con rasguños en el rostro, los brazos y el cuello. Decía que había visto a mi esposo la noche anterior, pero nada de lo que decía concordaba», comentó Janet.
La captura de Becerra, realizada en Lima, fue resultado de un trabajo meticuloso de la policía y la presión social ejercida por la familia y la comunidad. Janet relató cómo la policía logró seguir los movimientos de Becerra desde Jaén hasta Lima gracias a la videovigilancia. «Gracias a la videovigilancia, la policía lo siguió desde Jaén hasta Lima. Estamos esperando que la fiscalía y el Poder Judicial actúen con justicia y que se dé la prisión preventiva».
Janet también agradeció el apoyo de la comunidad jaena. «A mi esposo lo conocía mucha gente. Él era una persona muy amigable y un buen ciudadano. No era envidioso, y lo demostró al apoyar a Nelson a pesar de los robos. Sin el apoyo de la población, quizás no hubiéramos logrado nada”
El caso sigue en investigación, y la familia espera que se capture a los otros dos implicados. La tragedia de Edgar Sena Heredia ha conmovido a Jaén, y la comunidad sigue unida en su clamor por justicia.