La sala transitoria, que podría extender su funcionamiento tras una solicitud hecha por la Corte de Lambayeque, ha sido clave para hacer frente a la elevada carga penal en Jaén, donde predominan los casos de violación sexual (70-80%), seguidos por delitos de tráfico de drogas y contra el patrimonio, incluyendo extorsión y robo agravado.
Sánchez resaltó el trabajo constante del equipo de magistrados, quienes han realizado audiencias de lunes a viernes, contrastando con el anterior modelo, donde solo se realizaban dos días por semana.
Finalmente, el magistrado subrayó la necesidad de implementar una unidad de flagrancia en Jaén, un complejo que concentraría todas las autoridades relacionadas con los casos delictivos, lo que permitiría agilizar los procesos. Sin embargo, aclaró que la decisión final recae en el Consejo Ejecutivo del Poder Judicial en Lima.