La presidenta del Consejo de Mujeres Awajún y Wampis, Rosmery Pioc, denunció, en junio pasado, que desde 2010 se han registrado más de 500 casos de abuso sexual cometidos por docentes en la provincia de Condorcanqui, Amazonas. A pesar de la gravedad de la situación, las sanciones resultaron insuficientes, con solo 111 profesores destituidos y 72 más absueltos.
La falta de medidas efectivas ante estos delitos ha generado indignación en la comunidad, especialmente cuando el ministro de Educación, Morgan Quero, y la titular de la Mujer y Poblaciones Vulnerables, Ángela Hernández, calificaron los hechos como “prácticas culturales”.
El hecho que las autoridades minimizaran la situación provocó una reacción de repudio entre los ciudadanos, quienes exigen una respuesta más contundente.
A pesar de las denuncias públicas, la violencia sexual en la región persiste. Según La República, la UGEL de Condorcanqui ha registrado 22 nuevos casos solo en noviembre.
En los meses anteriores, el número de reportes fue igualmente alarmante: 16 en octubre, 14 en septiembre, 5 en agosto, 8 en julio y 10 en junio, lo que resalta la urgencia de tomar medidas inmediatas.
Rosmery Pioc expresó su preocupación por el creciente número de denuncias de violencia sexual contra menores en la región desde que el problema salió a la luz en junio. La situación ha llevado al Consejo de Mujeres Awajún a considerar tomar acciones legales contra el Estado.
Además, Pioc reveló, en conversación con el citado medio, que ella y otras integrantes del Consejo han recibido amenazas de muerte por parte de los apus, entre otros, debido a su labor de visibilizar y denunciar estos casos de abuso sexual en su comunidad.
Infobae
