El subgerente de Fiscalización y Control Administrativo de la comuna, Jorge Quiroz, sostuvo que es la tercera vez que intervienen este local «de la perdición», por denuncias constantes de los vecinos y turistas, quienes habrían sido víctimas de actos delincuenciales afuera o cerca del establecimiento.
Además, se conoció que otro problema que arrastra el “bar clandestino” es la drogadicción, lo cual pone en jaque la integridad física de las familias de la zona.
Quiroz también Indicó que en esta oportunidad se procedió a la clausura definitiva del establecimiento y decomisar los bienes muebles como camas, mesas, sillas, parlantes y hasta licores.
En tanto la PNP intervino a cinco supuestas meretrices y parroquianos para el control de identidad y otras diligencias correspondientes.
«Las circunstancias de la intervención se basaron en función al CUIS y RAS de la Municipalidad. Ahora se seguirá un proceso administrativo contra el propietario del inmueble», resaltó el funcionario.
«Seguiremos con estos operativos para combatir la prostitución y la informalidad, puesto que se busca el progreso y desarrollo de esta tierra», añadió el funcionario.
Nota de prensa